miércoles, 29 de julio de 2009

Día 80 - Nothing's fine, I'm torn

Desde el domingo de noche que no hago más que arrastrarme de un lugar a otro en camisón, principalmente de la cama a la cocina. Menos mal que fui previsora y compré muchas cosas con chocolate antes de la charla, porque sabía que de alguno de los dos me iba a tener que despedir y eso me angustiaba muchísimo. Así que resolví que mis penas iban a ser ahogadas en chocolate, y por lo tanto debía abastecerme de él. Compré muchas galletitas, alfajores, chocolate en barra. En resumen, todo lo que encontré en el super que tuviera chocolate.

Cancelé mis compromisos alegando que me sentía mal, lo cual no es del todo mentira. Me siento horrible. Me duele todo el cuerpo como si hubiera corrido una maratón o como si alguien me hubiera pegado en todos lados. No tengo ganas de hacer nada más que tirarme en el colchón a llorar, mirar series, y comer como un cerdo. Estuve pidiendo delivery, a costa de mi presupuesto, pero no me importa. En estas cosas uno hace lo que puede.

Tengo una llamada perdida de Valentina en el celular, que asumo es porque se enteró, pero no le pienso devolver el llamado. En mi casilla de mails, tengo uno de Fabi y otro de Romi, preguntando si hay novedades. Pero todavía no me animo a escribirles, y mucho menos a llamarlas. Contarlo, hace que pase a ser más creíble. Poder contarlo, implica aceptarlo. Y no sé si todavía lo hice.

Desde el domingo de noche que sueño que va a sonar el timbre, y va a ser Martín con un ramo de rosas. Sueño que me dice que me ama y que sí, todo puede estar bien entre nosotros. Sueño que ese beso en la puerta no fue el último, sino el primero de algo mucho mejor. Pero después me despierto, y me doy cuenta de que estoy sola, y de que Martín no va a volver a aparecer por la puerta de donde salió. Que va a pasar a ser un conjunto de recuerdos en mi cabeza. Desde nuestro primer beso, el cuatro de julio del 2004, hasta el último, el veintiséis de julio del 2009. Una sucesión de imágenes de cinco años de idas y vueltas que, para bien o para mal, terminaron.

Me cuesta creer que nunca más voy a sentir su perfume, y que ya no habrá más cenas de Burger King en el colchón. Que nunca más vamos a estar tirados en la cama, abrazados, hablando de pavadas. Y definitivamente, no puedo aceptar que nunca más vamos a "hacer el amor", como le llama él.

Yo sé que tengo al vecino, y que en algún momento le voy a tener que decir que sí, que quiero arriesgarme y ver que pasa. Pero, por ahora, no puedo concebir la idea de salir de mi departamento, ni siquiera para ir a tocarle timbre y decirle que quiero que estemos juntos. Hoy, en lo único que puedo pensar, es en el que se fue para no volver más.

26 comentarios:

  1. a ver: Si. Todas estuvimos ahí y la que no estuvo miente.
    Todo pasa y una sale fortalecida aunque en el medio de la cama y rodeada de galletitas de chocolate parecería que no.
    Sugerencia: Helado de chocolate y llorar lo que haga falta

    ResponderEliminar
  2. Fuerza Agus, de todas se sale. Igual esta bien que te tomes tu tiempo, un dia te vas a levantar y vas a saber que lo peor ya paso! Suerte

    ResponderEliminar
  3. Marchante: Supongo que en algún momento voy a mirar para atrás y voy a decir "me hizo más fuerte", pero es verdad, en este momento parecería que nunca voy a salir de esto.

    Adri: Sí, ojalá. Yo ya pasé por esto antes y sé que se sale, pero como cuesta!

    ResponderEliminar
  4. Agus: date tiempo. Se que no soy la más indicada para darte consejos, pero tratá de hacer cosas que te hagan bien. Está bueno que tengas tu tiempo para no hacer nada, para llorar y deprimirte. Pero por favor, tratá que esa fase no dure para siempre: la vida sigue! Fuerza!

    ResponderEliminar
  5. Upsss en este sentido tampoco estoy para darte consejos...

    Pero si te dejo un abrazo...

    ResponderEliminar
  6. Ayyy Agus, que tristeza!!! igual yo creo que esto no puede terminar así, hay mucho amor entre ustedes y esas cosas no se pasan de un día para el otro. Tal vez en un tiempito recapacite pero estaría bueno que estuvieran los dos en la misma sintonía para que no pase lo mismo de siempre, que cuando uno quiere el otro no.
    Besos y abrazos!!!!!!!!!!!!!!!

    ResponderEliminar
  7. Siempre duelen los cortes y esa máquina de inventar escenas en las que la rutina junto al otro desaparece...pero la realidad es que siempre hay un después de aquél que hoy cierra la puerta.


    Besotesssssssssssss!

    ResponderEliminar
  8. Soli: Yo sé que sigue, pero por ahora me cuesta aceptarlo. Necesito, por lo menos unos días más de reclusión y llanto.

    JASVI: Muchas gracias.

    Lu: No sé, es verdad que hay amor, pero creo que si había un momento ya pasó. No creo que volvamos a estar los dos en la misma sintonía.

    Blonda: Ojalá que así sea. Pero como cuesta aceptarlo!

    ResponderEliminar
  9. Leyendo blogs uno va "conociendo" a otras personas y congeniando de a poco, compartiendo gustos e ideas hasta que llega un momento como éste cuando uno recuerda que esto no deja de ser más que un vínculo a través de una pantalla fría. Y lo digo porque leer esto me provoca muchas ganas de abrazarte, aunque ni siquiera te conozca en persona y aunque muchos kilómetros nos separen. Y ya sé que no te cambiaría nada pero bueno... todos estuvimos así y vivimos. Siempre digo esto y memorizátelo: viviste antes de Martín, podés vivir después de Martín. Besos

    ResponderEliminar
  10. Dicen que lo que pasa es siempre lo mejor y yo lo creo. Lo de Martin y tú, visto desde afuera, era un juego de nunca acabar que no le hacía bien a ninguno. Por tus lineas se que lo quieres mucho y se que el dolor que debes estar sintiendo ahorita es insoportable pero va a pasar, eso es seguro. Estás viviendo un proceso de duelo y eso toma tiempo, así que llora lo que haga falta, come todo el chocolate que haga falta y sal cuando sientas que te provoca.
    Un abrazo fuerte.

    ResponderEliminar
  11. Tengo que hacer lo mismo, con alguien nueve años mayor que vos, el sábado.

    Vamos, ya está... como dijeron DE TODAS SE SALE.

    ResponderEliminar
  12. por eso la angustia te lleva a comer y el duelo es largo y uno tiene que descargarse con eso a veces la vida nos pone en situaciones dificiles que uno tiene que superar fuerza agustina no te quiero ver triste y todo en la vida se supera aunque cueste un gran abrazo de oso carlos

    ResponderEliminar
  13. =)
    A medida que vas escribiendo y sigo tu historia, te tomo cariño, Agus.
    En momentos asì no hay nada que decir que sirva, asì que sòlo te voy a decir eso.

    Abrazo.

    ResponderEliminar
  14. nena, tomalo con calma. hace tu duelo. no te tires a los brazos de nadie, todavia. cae en la cuenta. haceme caso, no seas boluda como yo. que cada cosa lleva su tiempo. lloralo, soñalo y dejalo ir. que el que se va sin que lo echen, vuelve sin que lo llamen. cuando estes lista emocionalmente, recien ahi cambiate y baja con seba.

    ResponderEliminar
  15. Mauri: Muchas gracias. Incluso yo misma lo viví unas cuantas veces y sé que se sale de esto. Pero en el momento igual te parece increíble que en algún momento vas a estar bien.
    Igual, me permito estar mal y hacer el duelo correspondiente. Separarte de una persona con la que compartiste tanto es difícil.

    Extranjera: Voy a seguir haciendo todo eso, porque considero que es necesario. Y además es lo único que puedo hacer en este momento.

    Lola: Qué difícil. Y sí, this too shall pass.

    Carlos: No sabría otra manera de sobrellevar la ansgutia que comer. Y es verdad, todo se supera.

    Pau: A mí me pasa lo mismo con todos. Y gracias, es suficiente.

    Lei: Ya sé, pero tampoco puedo demorar mucho porque si el me presionó para que decidiera qué era lo que quería con él no me puedo tomar mucho más tiempo. De alguna manera voy a buscar la forma de resolver el tema con el vecino.

    ResponderEliminar
  16. Si Agus, quedate en casa, descansa y como todo el chocolate posible habido por haber! (te recomiendo el cofler de almendras, y los alfajores "tortas" Águilas que son riquisimos!)
    Un besote gigante! :)

    ResponderEliminar
  17. un dia a la vez.
    llora todo lo q tengas q llorar.
    come todo lo q tengas q comer.
    un dia a la vez.

    ResponderEliminar
  18. Agus: entiendo que en éstos momentos precisas que Martín se vista de Príncipe azul y te rescate (aún en camison y sucia de chocolate), pero creo que es sano que pases por éste proceso.

    Martín no solo trajo noches de Burguer King a tu vida, esas noches tienen principio y final, pero el daño que te hizo anteriormente sabés bien que ha dejado marcas indelebles en tu corazón.
    Porque cuando recordamos siempre salen a flote los buenos momentos?

    Arriba linda !!

    ResponderEliminar
  19. quién no podría identificarse con un momento así...Uno los siente como el fin de una era, como un sistema colapsado. La buena noticia es que se viene una nueva era y aunque aun no la ves, está ahí esperándote. Tomate tu tiempo para llorar todo lo necesario. La nueva era sabe esperar.

    ResponderEliminar
  20. mujer, estopasa... es una transición logica

    ResponderEliminar
  21. es impresionante como te pareces a Carolina Aguirre para escribir.
    No seras otra LG no?
    Demaciadas coincidencias en la narracion.

    ResponderEliminar
  22. Luz: El cofler lo tengo acá mismo!
    Y sí, no me queda otra, a pasar estos días como mejor que se pueda.

    Sooz: El "un día a la vez" es la clave en estas cosas. No hay que pensar más allá de hoy. Tratar de pasar cada día lo mejor posible y listo. Mañana sérá otro día :D

    Cris: Tenés razón. Uno siempre tiene a hacer una especie de filtro, y se queda con lo bueno. No debería ser así, sino al revés. Para facilitar el proceso sería mucho más fácil acordarnos solo de lo malo.

    Julia: Es verdad que sabe esperar, pero con respecto al vecino tendría que hacer algo antes de que se aburra. Supuestamente me dio un ultimátum, me parece que entre hoy y mañana yo le tendría que contestar lo que pienso.

    Flori: Por supuesto. Pero como pesa!

    Anónimo: Te juro que no soy Carolina. Igual lo tomo como un cumplido, porque ella es mi ídola total.
    Igual yo las coincidencias no las veo :(

    ResponderEliminar
  23. siempre se puede volver a hablar, si con el néibor no va, MARTO VUELVE

    ResponderEliminar
  24. Date tiempo. Hace tu duelo. Y cuando estés preparada, abrile las puertas al vecino. Acordate que tampoco es obligación estar con uno u otro. Hacé solo lo que tengas ganas de hacer.
    ¡Mucha fuerza!

    ResponderEliminar
  25. que historia :/

    me encanta tu blog !!!!!ojalá cuando llegue a mis 21 pueda vivir sola y comer todos los dias comida chatarra o cualquier cosa que venga para microondas porque cero cocina tambien jaja te sigo besos

    ResponderEliminar
  26. llorate todo
    come todo lo que quieras y quedate en pijama hasta que te des cuenta todo lo que tenés por delante
    beso

    ResponderEliminar