sábado, 11 de julio de 2009

Día 62 - Friday I'm (almost) in love

Once de la mañana. Abro los ojos despacito y veo que no estoy en mi colchón sino en una cama. La del vecino, precisamente. Miro hacia donde debería estar él, pero no lo veo. La cama está hecha de su lado. Levanto la frazada y veo que tengo puesta la ropa de ayer. La remera colorada que tiene un lacito negro, y mi jean levi's preferido.
¿Qué carajo hago adentro de la cama de Sebastián, sin Sebastián, y vestida?

Totalmente confundida me levanté de la cama y me acerqué hasta el baño. Toqué la puerta despacito.
- ¿Seba?
No contestó. Entré, me lavé la cara y me peiné un poco pasándome las manos por el pelo. Me las lavé, puse pasta de dientes en el dedo índice y lo usé a modo de cepillo. No entendía nada, pero no iba a dejar que el vecino me viera en el peor de mis estados.

Salí del baño y caminé hasta la puerta del cuarto. La abrí, esperando ver a Sebastián en el living, pero no estaba.
- ¿Seba? ¿Dónde andás?
No contestó. Me acerqué hasta la cocina a ver si había alguna cartita suya, y encontré una pegada a la puerta de entrada que decía "No te vayas, linda. Ya vuelvo".

Me acerqué hasta el sillón para comprobar si lo que estaba pensando era cierto y -con horror - me di cuenta de que sí. En el sofá, había una almohada y una frazada.
God, durmió en el sillón. ¡¿Por qué?!

Desorientada, volví a la cama y me metí adentro. Traté de pensar en la noche anterior, y me vinieron a la cabeza diferentes imágenes. Me acordé de cuando llegué, y sé que en ese momento pensé en que cada vez que veo a Seba está más lindo. También sé que nos dimos unos cuantos besos al lado de la puerta y después nos sentamos en unos almohadones en el piso. Ahí fue que comimos la fondue de queso, y tomamos un poco de vino. Lo siguiente que me acuerdo es del vecino diciéndome que no tomara tanto, y yo me reí y lo ignoré, pensando en que el vino era inocente.

Luego de eso, comimos carne al horno con papas rosti. Después, me dio frutillas con chocolate en la boca, tal como lo había anunciado. Pero a partir de ese momento no me acuerdo de nada. Y asumo que es por cierto líquido que de inocente no tuvo nada.

Empiezo a armar el puzzle.
Mucho vino de mi parte + amanecer vestida en su cama + almohada y frazada en el sillón = me emborraché, me llevó a su cama y se fue al sofá.

No puedo creer lo imbécil que soy. Me invita a su casa, me prepara la cena, y yo ¡¿me quedo dormida?! ¿Qué clase de deficiencia tengo? ¿Cómo puedo haber sido tan idiota? Seguro que no me habla nunca más. Me puso en la notita que vuelve, pero seguro se escapó para no verme más.

Mi monólogo fue interrumpido por el ruido de las llaves en la cerradura. Avergonzada por todo, caminé hasta la puerta del cuarto y asomé sólo la cabeza.
- ¿Me odiás? - pregunté con miedo.
- ¿Qué? Jajaja. ¿Por qué habría de odiarte? - preguntó, y apoyó una bolsa de facturas sobre la mesa.
- Porque, sino me equivoco, ayer no estuve exactamente sobria - dije.
Se acercó hasta mí, y me dio un beso largo y profundo. Yo cada vez entendía menos.
- No, pero me re divertí. O sea, siempre me río con vos, pero ayer me tenté con cada cosa que me contaste.
Por favor, decime que no te dije lo del machucón.
- ¿Qué te conté exactamente?
- Muchas cosas. Me dijiste que tenías un machucón en la cola porque te olvidaste que habías limpiado el piso y te caíste.
- ¡No! - chillé. Me senté en una silla del comedor y metí la cara entre las manos. - Debés pensar que soy una inútil de mierda, y encima una loser total, porque nadie se cae así.
- ¿Cómo que nadie se cae así? ¿Sabés cuántas veces me caí yo? Dentro y fuera del departamento. Una vez me tropecé en la escalera de la facultad y todo el mundo se río de mí. Y yo también me reí, porque fue muy gracioso.

Saqué la cara de entre las manos.
- ¿En serio?
- ¡Obvio! Y además me cagué de risa porque me dijiste que habías limpiado el piso "al revés", entonces se te marcaban las chatitas. Jajaja, eso fue genial.
- ¿Genial? ¡No puedo creer que te lo conté! Me quiero morir. Cuando recién estás conociendo a alguien, se supone que tratás de mostrar lo mejor de vos, a la vez que escondés tus defectos. ¡Y yo estoy haciendo cualquier cosa!
- Escuchame una cosa, linda. ¿Qué te dije el día que fui a tu casa a ayudarte a cambiar la bombita?
- No sé - dije, al borde del llanto.
- Que odio a la gente que aparenta ser perfecta. Entendé que todo lo que pensás que estás haciendo mal, hace que me gustes más. Porque, mientras me contabas esas cosas te reías de vos misma. Hasta me dijiste que alguien te tendría que haber grabado, porque fue una caída monumental, jajaja. Nunca me había reído tanto con una mina como con vos ayer, te juro- dijo.

Traté de asimilar lo que me acababa de decir.
- ¿Te gusto?- pregunté.
- ¿No es obvio, vecinita? Me encantás.
- ¡Pero no te puedo encantar! Mirá lo que soy, un desastre. ¿Encima después me quedé dormida? O sea, ¿qué pasó después de que comimos fondue de chocolate?
- Estabas cansadita y un poco borrachita también, entonces te cargué hasta mi cama. Y ahí me pediste que me quedara con vos. Me senté al lado tuyo, y esperé a que te quedaras dormida para venir al sillón.
- Ay, qué horrible, por dios. Aparte, ¿por qué no dormiste en la cama? Ya hemos dormido juntos, no pasaba nada. ¡Debés haber dormido re mal en el sillón!
- No sé, no te quería incomodar. Aparte no pasa nada, es lindo el sillón. Dormí bien.
- ¡Seguro que no! No te podés imaginar la vergüenza que me da esta situación. Me siento horrible, te juro.
- Agus, no te preocupes, en serio. La pasé re bien con vos, y dormí bien. Además, cuando estaba sentado al lado tuyo en la cama me dijiste "sos lindo". Eso fue suficiente para que la noche fuera buena.

Me paré, me acerqué a él y le di un beso. Después me dio la mano, y me llevó hasta la mesa del comedor.
- Te prometo que te voy a compensar esto de alguna manera - dije.
- No hay nada que compensar, en serio. Traje facturas. Mi idea era llevarte el desayuno a la cama, pero bueno, es lo mismo. ¿Qué querés tomar? ¿Café?
- Sí.
- Cafecito para Agus, entonces.
- ¿Seba?
- ¿Qué, linda?
- Vos también me encantás.


Este había sido el título original. Lo cambié, pero ahora vuelvo a él. Dicen que siempre se vuelve al primer amor (?)

21 comentarios:

  1. Ahhhhhh!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! Absolutamente PERFECTOOOO!!!! :D :D :D
    Es como que todo es re natural y fluye y se da, simplemente... como tiene que ser! Es tu propia historia de no-complicaciones, que bien te merecés! :D Divino total, todo!

    Pasada la euforia, te confieso que creí que borracha le habías contado que estás casada y que por eso había dormido solo en el sillón! :O

    Bueno Agus, me alegro mucho por vos y disfrutá al 100% todo esto :D

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  2. Coincido con el vecino, cuando menos perfecta es la gente, más interesante y hermosa es.

    Beso borracha. :P (na, mentira)

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  3. Ay yo también pensé que en tu lamentable estado etílico habías confesado!! Pensé que le habías dicho que estabas casada y del blog! Cómo zafaste!!

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  4. Destila amor este posteo....pero...que lindo!!!

    Yo vivi tres años de mi vida en un edificio sola y nunca vi a un vecino que valiera la pena..

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  5. jaja, yo pense lo mismo, mientras leia pedia que por favor no se te haya esacapado sobre tu maridito!
    Me enanto la situacion, muy romantico y muy dulce es el vecino!

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  6. Ayyyy, quiero un vecino igual!

    Te cargó a la cama, muy lindo este tío!

    Un besote.

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  7. Madie: Yo en un momento, cuando me dijo que se tentó con cosas que le dije pensé que le había dicho que estaba casada y que él lo había tomado como un chiste (?). Tuve miedo de que se me hubiera escapado estando borracha lo del casamiento!

    Angie: Yo también!

    Maaar: Es tan perfecto que pienso que algo malo tiene que tener. He's just too good to be true.

    Pau: Yo también, pero no pensé que se aplicaba a mí. Jajaja

    Silvina: Yo también! Tuve terrible miedo!

    Lola: No. There's only one!

    Simplemente yo: Jajaja, yo tuve suerte. En mi otro edificio eran todos feos!

    Pequeña criatura: Todos nos cagamos con lo mismo! Jajajaja. Menos mal que no.

    Anabella: Sí, y se quedó conmigo. So cute.

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  8. Yo adhiero a lo que dice el muchacho, las mujeres más lindas son las espontáneas y risueñas, no las modelos serias de la tele (:

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  9. Ahhhhh Agus que amorrrr es para comérselo al Sebas !!!

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  10. me encantò!!! y me encanta que sebas celebre la no-perfecciòn

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  11. Mauri: Sí! Sobre todo él, yo me porte horrible!

    ¿Lesbiana?: Yo también, pero nunca pensé que se iba a aplicar a mí! Jajaja

    Cris: Sí, es divino. Es perfecto también.

    Minerva: A mí también me encanta. Además, para poder estar conmigo tenés que celebrar la no-perfección sí o sí, porque soy la persona más imperfecta que hay sobre la tierra.

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  12. Es un dulce de leche el flaco, no hay nada más lindo que alguien que sepa reírse de si mismo, me encanta. Punto para seba! Jaja, beso agus, te estoy leyendo.. :)

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  13. Yo creo que va siendo hora de que le cuentes a tu vecino tu situación marital, o sea, si quiere quilombos, va a estar en su salsa jajaja.
    Eso sí, de todas formas, si no es ahora, en un tiempo le vas a tener que contar a él la situación.
    Ahora disfrutá de tu vecino e indignate de tu borrachera jajaja.
    Un beso Agus!

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  14. Es muy divino. Un gentleman total, te das cuenta??? Otro degenerado te hubiese toqueteado toda!!

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  15. Más lindo tu vecinooo ♥
    y más borracha es la vecina de tu vecino ...
    ¿?

    jajaja

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  16. Cs: Terrible punto para Seba. Es divino!

    Facu: En un tiempo sí, pero por ahora no me parece. No sé ni en que estamos!

    Victoria: Yo también!

    Mari: Sí, no hay mejor palabra para él que "gentleman". Hasta durmió en el sillón, pobrecito!

    Daniela: Jajjaja. No sé de que hablás! jaja

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